Aprende a interpretar tus finanzas sin complicaciones
La mayoría de personas siente vértigo al mirar un estado financiero. Nosotros te enseñamos a leerlo como si fuera el periódico del domingo. Sin jerga innecesaria, con ejemplos reales.
Solicitar información
Ratios financieros
Esos números que parecen fórmulas químicas tienen sentido cuando sabes qué miden. Te enseñamos cuáles importan para tu sector y cuándo preocuparte.
Flujo de caja
Puedes tener beneficios y quedarte sin liquidez. Suena raro pero pasa constantemente. Aquí aprendes a detectar el problema antes de que llegue.
Análisis de tendencias
Un trimestre malo no significa nada. Tres trimestres seguidos ya es otra historia. Te mostramos cómo distinguir ruido de señales reales.

Trabajamos con casos que reconocerás
- Analizamos empresas que conoces del día a día, no ejemplos inventados de libros antiguos
- Cada concepto viene con situaciones donde realmente lo vas a necesitar
- Te damos plantillas que puedes adaptar a tu negocio desde el primer día
- Los ejercicios son preguntas que te harías tú mismo al revisar cuentas
Empiezas entendiendo qué estás mirando
Antes de calcular nada, necesitas saber qué significa cada línea de un balance. Dedicamos las primeras sesiones a que puedas leer cualquier documento financiero sin perderte.
Luego pasamos a identificar patrones. Cómo cambian las cifras entre períodos, qué movimientos son normales para tu industria y cuáles deberían hacerte levantar una ceja.
El objetivo no es convertirte en contable. Es que sepas hacer las preguntas correctas cuando alguien te presente números.

Comparaciones que tienen sentido
Comparar tu empresa con Apple no sirve de mucho. Te enseñamos a buscar referencias útiles: negocios de tamaño parecido, del mismo mercado, con estructura similar.
También trabajamos con series temporales. Tus propios datos históricos cuentan una historia sobre tu negocio. Aprendes a leerla y a detectar cuándo algo se sale de lo habitual.
El programa arranca en septiembre de 2025 y se extiende durante cuatro meses. Sesiones semanales de dos horas donde alternamos teoría breve con práctica extensa.


Llegas pensando que necesitas un máster en finanzas. Te das cuenta de que con cuatro conceptos claros y práctica constante puedes tomar mejores decisiones que antes.
Nerea Villalobos
Coordinadora pedagógica